El vídeo es un medio didáctico que puede alcanzar un alto grado de expresividad, lo que hace de él una herramienta de aprendizaje con la que el alumnado puede dominar un determinado contenido. Actualmente con los servicios de video elearning a través de streaming (Webcast), los formadores pueden diseñar un itinerario con videos de corta duración que ayuden a alcanzar los objetivos de aprendizaje propuestos.
La formación online a través de vídeo permite optimizar el tiempo de aprendizaje, adaptarse al ritmo que cada alumno necesita y conseguir un caudal de conocimiento continuo. Si a esto añadimos que cada vez más somos más consumidores de dispositivos móviles tipo Tablets o Smartphones, y accedemos desde estos dispositivos a la información,la importancia de este nuevo recurso educativo, se pone de manifiesto.
Los últimos datos publicados por comScore, líder mundial en la medición del mundo digital, sobre el consumo de video online en España según los cuales, en marzo de 2011 se vieron en España más de 3 mil millones de vídeos online con una audiencia aproximada de 19,3 millones de usuarios. De hecho, según el medidor de tráfico Alexa Youtube es actualmente el tercer sitio Web con mayor número de visitas en España , después de Google y Facebook.
Es importante prestar atención a esta tendencia ya que puede utilizarse para ayudar en la adquisición de conocimientos y para facilitar el aprendizaje de determinados temas.
Ahora bien, ¿qué aporta el video didáctico frente a otros recursos educativos?
Analizando el Cono de Aprendizaje del pedagogo Edgar Dale, la utilización de vídeos didácticos hace que seamos capaces de recorda un 50% frente a otros recursos como textos con imágenes o gráficos. De esta forma, los vídeos didácticos facilitan la construcción de conocimiento y permiten al alumnado alcanzar una mayor comprensión de la materia.
Sin embargo, es importante discriminar entre los contenidos didácticos en formato vídeo y el resto de actividades que componen el proceso de aprendizaje en su conjunto. A pesar de los beneficios de la utilización de vídeos, se debe tener precaución para que no se convierta en una actividad pasiva y el/la alumno/a se convierta en un simple espectador.
Por ello no hay que olvidar el umbral efectivo de atención que podemos mantener frente a una actividad de corte pasivo: un periodo de 6 a 10 minutos es considerado según algunos estudios como un tiempo adecuado de asimilación y concentración de un mensaje.
Por otra parte, el vídeo siempre debe cumplir un objetivo didáctico previamente formulado. incluido en el itinerario formativo en su conjunto . Por ejemplo podemos utilizarlos:
Al comienzo del itinerario formativo como material introductorio o de motivación, para luego plantear actividades o discusiones en grupo a través de las herramientas de comunicación integradas en la plataforma virtual de aprendizaje.
Para realizar demostraciones de procesos de trabajo para luego intercalar trabajos parciales.
Para recapitular y utilizarlos para plantear una reflexión o discusión en la que se trabajen los temas principales, etc.
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